¿Cuáles son los derechos de los inquilinos de alquiler sin contrato? (2024)

Antes de entrar de lleno en el tema de qué pasa si un inquilino no tiene contrato en España, conviene matizar que en realidad esta expresión es errónea. Con ella se hace referencia a que quien alquila la vivienda no dispone de un contrato por escrito, pero no se trata ni mucho menos de una ocupación ilegal si entre el inquilino y el arrendador existe un acuerdo verbal.

¿Es válido el contrato verbal de alquiler en España?

La Ley de Arrendamientos Urbanos no exige que el contrato de alquiler tenga forma escrita. Por tanto, no hay ningún problema a la hora de formalizar el contrato de forma verbal, alquilar sin contrato escrito es legal.

Lo que ocurre es que a efectos prácticos siempre es mucho más recomendable celebrar el contrato por escrito y mejor todavía si dicho documento es redactado por un profesional. De esta forma, cada una de las partes es más consciente de los derechos y obligaciones que tiene.

Pero, al margen de esta apreciación, el contrato verbal es totalmente legal. Es más, los derechos del inquilino sin contrato de alquiler formalizado por escrito son los mismos que tiene quien sí ha firmado un contrato.

¿Qué derechos tiene el inquilino sin contrato?

El inquilino que no ha celebrado con su arrendador un contrato por escrito tiene los mismos derechos fundamentales que se le reconocen al arrendatario con contrato celebrado por escrito:

• Puede usar y disfrutar de la vivienda sin ser perturbado en esa posesión.
• La duración y las prórrogas del contrato se regirán por lo dispuesto e la Ley de Arrendamientos Urbanos.
• Puede exigir las reparaciones necesarias que según la ley deben correr a cargo del propietario.
• Tiene derecho de adquisición preferente (derecho de tanteo y retracto) en caso de venta de la vivienda.
• Llevar a cabo reformas de adaptación de la vivienda en caso de discapacidad suya o de su cónyuge.

¿Cuáles son las obligaciones de un inquilino sin contrato?

La relación de arrendamiento implica derechos y obligaciones para ambas partes. En este caso, el inquilino que no tiene contrato por escrito está obligado a:

• Pagar la renta en el tiempo y forma acordado con el propietario de la vivienda.
• A conservar la vivienda en buen estado.
• Realizar pequeñas reparaciones que sean necesarias debido al uso ordinario de la casa.
• No realizar en el inmueble actividades que puedan resultar molestas.

¿Hay que rescindir el contrato de alquiler si se ha celebrado verbalmente?

La rescisión del contrato es la mejor manera de que ninguna de las partes pueda exigir nada a la otra cuando la relación de arrendamiento ha finalizado. Que el contrato no se haya celebrado por escrito no significa que al finalizar el mismo no sea conveniente dejar constancia por escrito de que el arrendamiento se ha acabado. Este documento aporta ventajas para ambas partes.

Como en el caso del contrato celebrado por escrito, se puede dejar la redacción del documento que pone fin al alquiler en manos de un profesional en la materia.

Para mayor seguridad, el propietario puede contratar un seguro de impago de alquiler para poder contar con asistencia profesional en el caso de posibles conflictos derivados por la falta de pago de alguna mensualidad.

¿Cómo desalojar a un inquilino sin contrato en España?

En el caso de que te esté causando problemas, tendrás que seguir una serie de pasos para poder echar a un inquilino sin contrato y que abandone tu propiedad:

• Dar aviso al inquilino sin contrato, normalmente por burofax para asegurarte que este recibe el anuncio, de que tiene que abandonar el inmueble y los días que tiene para hacerlo.
• Si el primer punto no funciona, tendrás que pasar a la vía judicial interponiendo una demanda en la que deberás adjuntar las pruebas necesarias para justificar el proceso de desahucio.
• Por último, recibirás una notificación en la que se determinará la fecha de lanzamiento en la que el propietario podrá volver a tomar posesión de su inmueble.

¿Cuánto tiempo se le da a un inquilino sin contrato para desalojar?

Se notificará por escrito con un total de 30 días de antelación, independientemente de la causa, incluido el impago de alquiler salvo que se trate de discriminación ilegal o retaliación. Aparte de esto, hay una posibilidad de avisar con 7 días de margen cuando existe una razón de peso como un problema con los vecinos o un deterioro de la vivienda